Siempre es recomendable, antes de realizar un viaje al extranjero, apuntarse un número de emergencia del país de destino para casos de imprevistos graves. Nunca se sabe cuándo lo podremos necesitar.

En 1991 Europa creó un teléfono único de emergencias, el 112. Desde entonces este teléfono ha ido evolucionando en los distintos países europeos con el fin de prestar un servicio lo más eficaz posible en cada caso. Uno de los servicios consiste en responder en el mismo idioma que el alertante, es decir, si un teléfono español llama al 112 será atendido por una persona que hable español. Lo mismo ocurre con un teléfono italiano, ruso, francés, alemán, etc. En conclusión, en caso de tener una emergencia en un país que pertenezca a la Unión Europea se deberá llamar al 112.

Teléfonos de emergencia de otros países en orden alfabético: